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AUTORIDADES, CUANDO SU PODER SE CONVIERTE EN UNA DROGA‏
Cuando se elige a una persona para ocupar algún cargo de importancia en una institución, ya sea de Gobierno o privada, se le está dando poder, por ello deben ejercer su autoridad con valores y liderar una Campaña de valores para cumplir bien las funciones del cargo El Presidente de la República y las demás autoridades de los poderes de Estado, gobiernos municipales y regionales, deben ejercer el poder basados en los valores de vida y la moral: con la VERDAD, siendo muy transparentes, comunicando al pueblo como se gasta el dinero del presupuesto, bien podría ser a través de páginas Web y redes sociales, para no caer en la corrupción, porque es la peor dictadura y el peor antisistema. Las autoridades deben actuar con JUSTICIA, respetando la autonomía del Poder Judicial.
Si el Presidente de la República ejerce el poder con valores, transparencia, honradez y con mucho respeto, la LIBERTAD será real y lo hará libre. Quiere decir que es importante el buen ejemplo que dé la máxima autoridad, de él depende mucho, para que haya un gran cambio en la sociedad y estará predicando con el ejemplo, viviendo en ARMONÍA FAMILIAR en su hogar: así las demás autoridades y la sociedad, se contagiarán en hacer lo mismo, ejerciendo el poder a favor del Bien Común, sin robarle al Estado, es decir: Servir al Pueblo y no servirse del Pueblo, esto es un sabio consejo, es lo normal, lo legal, y lo aceptado por el pueblo.
Cuando el Presidente y sus Funcionarios no actúan con valores y moral, caen en la corrupción y el poder lo utilizan como una droga, que los impulsa a seguir robando cada día más al Estado y utilizan el poder para sacar provecho personal. Un Presidente con Poder Político y que no quiera reconocer la autoridad de otras autoridades, sino que cada vez copa todos los poderes, es un Presidente adicto al Poder, sin escrúpulos para lograr el control total y absoluto de las Instituciones Públicas, en especial las dependencias de control. Cuando el Presidente y su personal de confianza utilizan el poder como una droga, no sólo avasallan a las voces discrepantes, sino que se orienta a manipularlas, y no escucha a nadie, porque se aprovechan de la prensa ayayarera para recibir un falso respaldo popular.
Cuando el poder se convierte en una droga y fracasan las autoridades, un remedio importante es hacer actos de humildad durante su gobierno, para prevenir y desaparecer los efectos de este falso poder político, porque las autoridades caen en la corrupción, no pueden gobernar bien, no pueden vivir en armonía.
Si los actos de humildad fueran efectivos y los aplicarán periódicamente, podrían superar la crisis de violencia social. Si las autoridades lo hacen con mucho amor al pueblo, podrían vivir en armonía con ellos, que es: El entendimiento entre las autoridades y el pueblo, se expresa en un estado de animo armónico, dialogante y de entrega; sustentado en Valores de Vida, encaminados a conseguir vivir en la Verdad y lograr un desarrollo económico y moral.
Las autoridades cuando viven en armonía familiar en su hogar son un buen ejemplo para el pueblo, para que ellos también vivan en armonía familiar en su hogar, seguro que los resultados serán satisfactorios para superar los problemas de gobierno, porque el pueblo copia todo lo que ve de sus autoridades, y así se ejerce una mejor democracia: “a más armonía familiar, buena calidad de educación y mejor seguridad ciudadana”,
Los Actos de Humildad de las autoridades más importantes pueden ser: pedir perdón al pueblo cuando lo han ofendido, y no refugiarse en pedir disculpas, peor si fuera ante la muerte de algunas personas por errores de gobierno; reconocer los errores y prometer no volver a cometerlos, si volviera a suceder, con más seguridad pedir perdón al pueblo y poner a prueba su fuerza de voluntad, puede ser con la ayuda de un asesor político. Prometer al pueblo no volver a ofenderlo si volviera a suceder, duplicar la fuerza de voluntad para pedir perdón y poner a prueba los valores de vida. También es recomendable que las autoridades cultiven decididamente los valores de: la verdad, la justicia, la unidad, la libertad, la paz, la armonía, la vida.
Nos permitimos recomendar al actual gobierno que un buen acto de humildad debiera ser que el Presidente de la República y sus funcionarios, encabecen una marcha popular en las principales ciudades del país, para luchar contra la corrupción guiados por los valores y dejar establecido en el pueblo, que continúe una gran Campaña de Valores, porque los valores tienen una gran fuerza, así se estaría confirmando la Revolución de Valores para una gran transformación con inclusión social. Todo esto podría ser un buen ejemplo para salir de la crisis financiera del Perú y de otros países.