OBISPO DEL PERÚ

OBISPOS RECHAZAN GUÍA DEL ABORTO TERAPÉUTICO Y PIDEN SU DEROGATORIA

Los Obispos del Perú expresaron hoy su firme rechazo a la Guía Técnica Nacional sobre el aborto terapéutico, aprobada recientemente por el Ministerio de Salud y pidieron al presidente Ollanta Humala su derogación "porque la primera inclusión es el derecho a vivir y solo Dios es dueño de la vida, mientras que a nosotros nos corresponde cuidarla".

En un comunicado emitido hoy, los obispos conformantes de la Conferencia Episcopal Peruana señalan que con esta Guía se abre por primera vez en la historia del Perú, las puertas al aborto, "es decir, al asesinato de una vida humana inocente".

Al calificar la norma como "inmoral, inconstitucional e ilegal", los obispos recuerdan que el artículo 1° de la Constitución Política del Perú declara que “la defensa de la persona humana y el respeto de su dignidad son el fin supremo de la sociedad y el Estado”.

Aluden asimismo, al articulo 2 de la carta Magna en el que se reconoce que toda persona tiene derecho a la vida y que “el concebido es sujeto de derecho en todo cuanto le favorece”. 

"En consecuencia, de acuerdo al ordenamiento legal peruano, concordante con el Derecho Internacional, tanto la madre gestante como el niño concebido tienen el mismo derecho a la vida, así como a ser defendidos por el Estado y respetados en su dignidad", indican en el comunicado.

De acuerdo su opinión, los obispos remarcan que la mencionada Guía es una flagrante violación al Estado de Derecho, pues permite dar muerte a niños de hasta 22 semanas de gestación, "a los que, mientras se encuentran indefensos en el seno de la madre, se denomina despectivamente contenido uterino".

A juicio de los obispos de la Conferencia, la Guía Técnica Nacional no es necesaria porque los especialistas en la materia muestran que en casos excepcionales, donde la vida de la madre y la de su hijo corren riesgo, existen múltiples recursos disponibles, gracias a la tecnología médica, que pueden salvar ambas vidas.

Deploran asimismo, que a partir de esta norma se considere la vida como algo descartable, que está sujeta a la decisión de la madre y de una junta de médicos.

"Se ha abierto una grave herida en la dignidad de la persona (...) al escoger la violencia y la tortura contra el inocente se debilita y erosiona el fundamento sobre el cual se construyeron los valores de nuestra peruanidad", agrega el comunicado.

Señala igualmente que con la aprobación de la mencionada norma el Ministerio de Salud ha ignorado la voluntad de la mayoría de los peruanos que, en diversas ocasiones y en multitudinarias marchas, tanto en Lima, como en Arequipa, Iquitos, Piura, Puno, Trujillo, Cusco y otras ciudades del país, han expresado la defensa de la vida y el rechazo al aborto.

Finalmente, hace un llamado a las madres gestantes a que defiendan la vida de sus hijos, al igual que a los médicos y enfermeras "para que, recordando la nobleza de su profesión y el juramento que hicieron en defensa de la vida, sean los custodios y protectores de cada niño concebido"